Diseñamos nuestra vida mediante el poder de nuestras elecciones.
Richard Bach
Estoy muy feliz de compartirles que para este año mi propósito había sido correr un maratón, y este es el segundo del año. También me da muchísimo gusto decirles que es el primer maratón que corremos Lety(mi esposa❤️) y yo.
No puedo contarles solamente mi experiencia en la carrera. Esta vez, contrario al maratón pasado, tenía algunos aprendizajes que no quería que me volvieran a pasar, como ese sentimiento de frustración a media carrera por no haber entrenado lo suficiente, no saber que tan seguido tomar hidratación o empezar con un ritmo demasiado rápido la carrera.
LA PREPARACIÓN
Por todo lo que les contaba, decidí empezar un plan de entrenamiento de 4 meses. Así, desde mayo, empecé a entrenar por mi cuenta según marcaba el plan. La mayoría de las semanas fueron de 5 entrenamientos semanales, con dos días de descanso: Lunes y Jueves. Los domingos, las distancias más largas. Y como se podrán imaginar, muchos domingos me tocó correr distancias después de un día de cobertura de boda. A pesar de los viajes en ningún momento abandoné el entrenamiento, y no me perdí ninguna distancia.
Una de las distancias que mas recuerdo es cuando me tocó correr 28km y estaba en Nueva York. Dormí sólo 3 horas después de la boda porque tenía que empezar el entrenamiento temprano, ya que ahí el amanecer es a las 5:30am. Y entre más tarde entrenes, peor es el calor. Y definitivamente preferí dormir un poco menos, y empezar a correr temprano esa distancia. Es fin de semana obviamente no fue el único, así fueron muchísimos, y francamente los últimos meses ya me sentía cansado. Pero eso pasa cuando tienes un propósito. El entrenamiento, o todo el proceso que se lleva a cabo es el que menos se ve y más compromiso necesita. Y si quieres tener un resultado que puedas disfrutar, no puedes fallar en ese bonito proceso.
El día de la carrera, 25 de agosto 2019
5:00 A.M.
Si, la carrera empezaba a las 6:45a.m. Y nuestro bloque salía hasta las 7:35a.m. Pero si queríamos llegar a tiempo, teníamos que salir desde las 5:00a.m. para empezar a calentar y estar a tiempo en nuestro bloque de salida. El día de la carrera, el servicio del metro empieza muy temprano y es gratis para todos los corredores. El airbnb en el que nos quedamos estaba muy cerca de una estación de metro y ahí comenzó la experiencia. Estaba lleno de corredores! Se sentía el ambiente y la emoción ya empezaba.
La salida fue justo al lado del Estadio Olímpico Universitario de la UNAM. El clima estaba delicioso y el sol apenas salía. Todos los corredores estaban listos, e incluso, algunos bloques de adelante ya habían salido.
La salida
Cuando cruzamos la salida activamos nuestros GPS para medir el tiempo y empezamos a correr. Los primeros 15km aproximadamente eran una recta por la gigantesca Av. Insurgentes, y a pesar del mar de gente, nunca me sentí atrapado o que no pudiera mantener mi ritmo. Esta vez desde el principio seguí mi ritmo por el cual había entrenado. Iba disfrutando cada kilómetro.
Al llegar el primer punto de hidratación, yo seguí. No quería cometer el error de la vez pasada, por lo que en esta ocasión sólo agarré poca hidratación a lo largo de la carrera y cuando sentía que realmente me podría ayudar. Me sentía realmente bien, y feliz de estar ahí.
KM 26
Sorpresa! Justo en el km 26 del recorrido, pasabas enfrente del imponente Museo Soumaya y de muchísimas cámaras que te tomaban foto, y que podías ver directamente en la aplicación de la carrera. La verdad iba disfrutando tanto el recorrido que el km 26 se me llegó muy rápido, y justo cuando me estaba tomando una «selfie» fue cuando estaba pasando frente a las cámaras, y ni cuenta. Me sentí muy sorprendido de lo bien que me sentía en ese kilómetro.
KM 38
En el kilómetro 38 ya sentía cerca meta, mas cerca de lo que estaba. Mentalmente eso fue desgastante porque ya quería llegar, y de hecho ya estábamos muy cerca del zócalo, que es donde terminaba la carrera. Al avanzar y ver que realmente no faltaba tan poco, me sentí muy cansado y empecé a tomar ahora si toda la hidratación que ofrecían, naranjas, plátanos y dulces. Al hacerlo también bajé mi ritmo y empecé a caminar. No quería llegar a la meta muriendo como el maratón pasado, así que por un kilómetro y medio seguí caminando a paso rápido y en el km 40 decidí cerrar con toda la energía que me quedaba hasta la meta. Me sentí con mucha energía y felicidad de que me faltara tan poco para llegar, y esos 2.2km se pasaron volando. Ver que llegaba a la meta con tanta energía me hizo sentir una satisfacción inmensa. Cuando crucé la meta estaba gritando de felicidad y otro corredor me tomó una foto. También pueden ver las fotos que tomaron en el cierre. Mi tiempo de la carrera esta vez fue de 4horas con 20 minutos. 15 minutos menos que la vez pasada, y me sentía muchísimo mejor físicamente. Estaba cansado obviamente, pero no me sentía lesionado o débil. Aprendí que cualquier objetivo por difícil que parezca, si te preparas con dedicación no lo verás tan difícil, y al lograrlo la satisfacción será absoluta.
Después de un rato más llegaron mi querida amiga Cristi a quien quiero agradecerle por ser parte de esta increíble experiencia, y mi amada Lety, por apoyarme en todo este proceso y haber entrenado conmigo muchos domingos desde las 5 de la mañana❤️.
Gracias de corazón por llegar hasta aquí. Pronto les contaré más sobre más historias del fotógrafo de bodas aventurero que ya conocen.
Les mando un abrazote a todos! 🙂
Con cariño,
Sergio